| La primera referencia sobre la necesidad de crear un centro de estudios superior que capacitara en materia de Defensa Nacional a los futuros conductores civiles y militares de la administración pública, la encontramos en la antigua Ley Orgánica de la Defensa Nacional, promulgada por el Directorio Cívico Militar a través del Decreto No. 275 del 22 de agosto de 1961 en el capítulo VI de los Centros Docentes. La Ley ordenaba en sus Artículos 59 al 63, lo siguiente: “El Presidente de la República y Comandante General de la Fuerza Armada organizará la Escuela Superior de Defensa. Dicha escuela tendrá por misión la preparación de los futuros oficiales generales de la Fuerza Armada y de funcionarios superiores de la administración civil del Estado, que en razón de los cargos que actualmente desempeñan o que habrán de desempeñar en el futuro, tengan injerencia o relación directa en materia de Defensa Nacional, y serán designados al efecto por el Presidente de la República y Comandante General de la Fuerza Armada. La designación referida se hará a proposición de los respectivos Ministros de Estado”. El Decreto Ejecutivo No. 8, publicado en el Diario Oficial 20, Tomo 258, de fecha 30 de enero de 1978, aprueba el Reglamento Orgánico y de funcionamiento del Centro de Estudios de la Fuerza Armada (CEFA), en el Art. 23, dicho Reglamento establece: “El Curso Superior de Defensa Nacional, funcionará cuando el Alto Mando lo determine, pudiendo ser integrado por jefes y aquellos profesionales y funcionarios civiles designados por el Ministerio de Defensa y de Seguridad Pública”. Las asignaturas a ser impartidas en ese curso se determinaron de conformidad a las necesidades de seguridad y desarrollo del país, considerándolas en su aspecto integral. Tres décadas transcurrieron a partir de esa primera iniciativa; dicho instituto nunca fue organizado y se perdió la oportunidad de crear este espacio de análisis y discusión de la realidad nacional que contribuyera al desarrollo y seguridad de la nación; sin embargo, el proyecto permaneció latente en el seno de la Fuerza Armada, esperando el momento propicio para ser materializado. |
